Etiquetas
Buena Fé, concierto, concierto Buena Fé, Cuba, exilio cubano, música cubana
“Israel Rojas y los integrantes de la agrupación Buena Fe personas non gratae en la ciudad de Miami”, así decía una carta enviada al alcalde de esta ciudad al Sur de Estados Unidos, Tomás Regalado, que se unió a las acciones que por estos días rechazan de manera contundente el concierto que el próximo 18 de septiembre ofrecerá la prestigiosa agrupación cubana en el Miami Dade County Auditorium.
Es el cuarto concierto que los músicos organizan en Estados Unidos, pero esta vez ha sido diferente. ¿La razón? Un sector de la comunidad de cubanos residentes en Miami ha considerado que estos artistas “apoyan públicamente el régimen castrista”, y que su presentación en Miami atenta contra ellos.
No es la primera vez que esta comunidad expresa rechazo hacia músicos cubanos esgrimiendo razones políticas. Hace unos días publicó Buena Fe en su página en Facebook: “si Descemer Bueno expresa su desacuerdo con el Bloqueo, aunque tenga el mundo «Bailando» es un mal cubano. Si Silvio Rodríguez firme en sus principios y se va a los barrios más pobres a cantar, es un mal cubano. Si Tony Ávila compone una canción como «La Casa», aunque le guste que «Chicha la tenga limpia», es un mal cubano. Si Buena fe hace su segundo concierto gratuito para miles de jóvenes, el «Día Mundial de la Juventud» declarado por la UNESCO, (recuérdese que en 2008, hizo uno igualito y enorme en la Plaza de la Revolución), son malos cubanos. Me pregunto: quienes temen a canciones, que hacen la vida dentro de Cuba más llevadera ¿Son buenos cubanos?”
¿Qué lectura podría extraerse del hecho de que ese sector rechace a jóvenes agrupaciones con amplio prestigio nacional e internacional que relatan en sus canciones la realidad del país? Sigue leyendo